Ratones. ¿Es buena tanta novedad?

Todos estamos muy contentos con los nuevos ratones ópticos. Se acabó limpiar la ruedita y los cilindros, son mucho más cómodos etc... Pues resulta que de repente uno de los míos empieza a hacer movimientos raros o quedarse parado. Después de mucho pensar que pasaba, rasco la superficie de la mesa con una regla, limpio como mandan los cánones con un trapo húmedo y el ratón vuelve a ir como la seda. Ahí esta el problema de los nuevos ratones, son muy sensibles a los cambios de color (los problemas que dan las alfombrillas decorativas) y la suciedad en la superficie, sobre todo cuando es irregular, o simplemente por las marcas que hacemos con el mismo ratón en el esmalte en los apoyos para teclados. No todo tendría que ser perfecto.
A esto podríamos sumar los problemas de los inalámbricos, que si no te acuerdas, de vez en cuando se quedan sin carga y necesitas un día para cargarlos. Por esa razón en el cajon tengo siempre uno de cable, por si las moscas, y por eso mismo jamás he vuelto a comprar teclados y ratones inalambricos. Te ahorras cables a la vista, pero luego te fallan en el peor momento y te obligan a tener otras unidades, pilas... alrededor. No hay como lo "viejo" probado. Lo nuevo suele ser más "ergonómico", ahorra energía, evita cables, de "diseño", tiene rueda superior (eso si que ha sido un avance), teclas añadidas de multiples funciones (que solo molestan y les das cuando menos te lo esperas), pero hasta que los pruebas no descubres los nuevos inconvenientes.
De todas maneras yo soy de la época de MS-DOS, es decir, "Al principio... fue la línea de comandos" (Neal Stephenson) y sin ratón (y sin disco duro, puestos a eso), y de aquella tenía la sensación de que dominaba, con mi limitado conocimiento informático, la máquina. Ahora, con ratón, muchos discos duros y uno (o varios) entornos gráficos diseñados para hacérmelo todo más fácil, me da la sensación de que necesito horas y horas de formación cada día para mantenerme a nivel de la máquina, que está compitiendo conmigo para hacer imposible que la controle y es ella la que acabá controlándome.