¿Qué hay en mi bolsa?

Hagamos una pequeña introducción. Como se ve a la derecha, uno de los blogs que leo habitualmente es el de Enrique Dans. Coincido con él en muchas opiniones y siempre se puede aprender sobre técnicas de comunicación, maquinitas modernas y el uso de algunos programas. He estado pensando y meditando un tiempo bastante largo después de leer una de sus últimas entradas (recomiendo leerla). Tras observar todas las cosas que lleva en su trabajo he pensado que la mía se parece mucho más a la suya antigua. Sin embargo, no es del todo así. Es cierto que tengo un Kindle igual (de hecho me había resistido a comprarlo hasta que él describió todos los usos que hacía con él). Por otro lado, yo jamás compraré un Mac (odio en si misma la idea de marca única, por buena que sea). No uso ni tengo interés en absoluto de usar un Blackberry ni nada parecido. Uso un telefono móvil d elo más simple que pueda conseguir, y no quiero más, no vaya a ser que me encuentre todo el mundo. Y para terminar me di cuenta de que mi bolsa, que parece tan antigua solo me la llevo en el ocio. Mi bolsa de trabajo está vacia, o como mucho llevo un lápiz por si me falla la unión a red. No necesito más. Llegó a donde sea con conexión a red, me comunico con Dropbox y queda todo solucionado. Creo que se debe a que la mayor parte d emi trabajo se desarrolla en aulas, que tienen lo que yo pido para su uso. Solo cuando me tengo que desplazar llevo un portatil.Ahora mismo uso un Toshiba, pero hasta hace muy poco, y aun ahora, uso un Netbook de los más antiguos y sin disco duro (ya sabemos por qué), y me arreglo con un Slax en un lapicero Kingston slim de 2 Gb (como 6€). Es lo bueno de ser menos importante. También es cierto que a mi me lee menos gente. Y lo dejo, que aunque sea temprano, tengo sueño y quiero leer algo; para ser exactos, Marcos y salmo 110.