Ubuntu 11.04 ¿Merece la pena?

Como decía en la entrada anterior, voy a contar la maldición de la última semana de Ubuntu 11.04. Después de cargarmelo yo solito, eso sí es cierto, lo reinstalé limpio, ya que no conservaba las configuraciones de home (solo guardo, en general, la de Firefox y aMule en mi casa y la de Thunderbird en el trabajo). A lo largo de ese tiempo me ha pasado, de más a menos:
- Ubuntu en general; se ha quedado colgado 6 veces en una semana. Pero es un cuelgue de los de Windows. No responde a Ctrl+Alt+Backspace para saltar X; eso era esperable, pues como ya sabemos, está deshabilitado. Sin embargo, tampoco responde a AltGr+ImpPant+K, por lo que parece ser algo más profundo que el sistema gráfico. Pero lo peor, no responde a la combinación AltGr+ImpPant+REISUB/O, con lo cual da la sensación de que tenemos un pantallazo azul sin azul, ya que lo que vemos es la última pantalla congelada sin poder hacer nada, salvo darle a la tecla de apagar el ordenador. SEIS VECES así (normalmente en Windows en las peores épocas eran 2 por semana).
- Otra de Ubuntu; la mayor parte de las veces no apaga correctamente el ordenador (ninguno de los 3 o 4 que tengo con 11.04) y hay que terminar de apagar la placa con la tecla de apagar unos segundos.
- No he podido configurar el numero máximo de ficheros abiertos por que aunque edite limits.conf y reinicie, el sistema mantiene los 1024. He comprobado varias veces que no me he equivocado en las líneas escritas ni errores en el nombre de la orden etc... pero nada. Eso es un problema si el número de peticiones en aMule o el número de ficheros compartidos es elevado; a mi me fastidia bastante. Me ha obligado a generar un límite de 4096 en terminal mediante ulimit -n 4096 y mantenerlo abierto durante toda la sesión, ya que si lo cierro, volvemos a 1024.
- Estoy cansado de Super+A, Super+F... (estoy bastante cansado del Super, como Mortadelo y Filemón), con lo que llamo a muchos programas desde un terminal, y al final termino con un montón de terminales en la última área de trabajo, a donde los mando para que no se me convierta el escritorio en la selva de las ventanas.
- Continua el error en la configuración de Firestarter, por lo que hay que configurarla una vez instalada.
- Firefox; no podemos echarle la culpa a Ubuntu, pero fastidia lo mismo. Me está alterando los marcadores cada vez que intento guardar una dirección en cualquiera de los 4 ordenadores que tengo sincronizados. Tal es así que he tenido que hacer un json de seguridad para no perder las más importantes y estoy restaurando continuamente. Para molestar más, no me funciona el sistama de activación de las llamadas a los enlaces ed2k. No me sirve ni el sistema que usaba hace unos meses en el mismo 11.04.
- aMule: el programa me desaparecía cada 15 minutos, aproximadamente, con lo que era imposible bajar nada. Eso duró un par de días; a partir de ese momento, y sin que yo haya hecho nada por ello, se mantiene, al menos hasta que se bloquea totalmente 11.04.

En resumen, hasta las narices de Ubuntu 11.04. Las opciones que me planteo son:
1. Aguantar hasta 11.10, que solo faltan 5 semanas. Su instalación es facilísima (mucho más que la de Windows), nos permite la incorporación de ppas; es el sistema más fácil de usar que uno se pueda imaginar (llevo ya más de 4 años con él y empieza a generar una cierta dependencia).
2. Debian: lo bueno, muy estable; jamás me ha fallado; por contra, da la sensación de que siempre está por detrás (quizá por eso sea estable); me falta lo que más me gusta, la incorporación de ppas para meter aplicaciones.
3. Triskel: recomendación personal de hckorootx. Lo bueno, hecho en casa, más estable (me dicen); por contra, es un ubuntu 10.10; seguimos con las mismas.
4. Fedora: no lo conozco; la ventaja sería probar gnome shell, pero me estoy aguantando por que nuestro amigo hckorootx me dice que en su portátil "tira" de prestaciones. Me atrae saber que es el que usa habitualmente Linus.