He estado "jugando" este fin de semana con Fedora 16 y Gnome Shell y me está gustando mucho. En primer lugar, el icono de Dropbox es visible, en el panel ¡INFERIOR!, no arriba como estaba costumbrado en Ubuntu. De hecho, se ve en la entrada anterior, donde yo no lo encontraba. Para más señas, así:
Segundo, todo se mueve de una forma más fluida, lo que puedo demostrar ya que he sido capaz de instalarlo en mi Aspire One en un lápiz Kingston R410 de 8GB y se consigue un uso normal, al contrario que Ubuntu 11.10 en un lápiz USB Kingston HyperX, que se comporta de forma mucho más lenta.
Eso me lleva a pensar en que cuando termine la docencia de este semestre quizá cambie todos mis ordenadores a Fedora. Solo me retienen tres cosas:
- Primero, el gestor gráfico de instalación de paquetes es muy lento, lo que me obliga a instalar todo desde yum. No es un problema muy grave, pero me obliga a saber los nombres de los paquetes.
- Segundo, el uso que estoy haciendo ahora mismo del servicio Ubuntu One. Por suerte, gracias al uso del ofrecimiento a los miembros de instituciones educativas que oferta Dropbox (gracias Ángel por decirme como), he conseguido un aumento en mi cuota de más de 5GB, lo que me deja una capacidad de 12,9GB, con lo que puedo sustituir la pérdida de los 5GB de Ubuntu One.
- Tercera, y la más importante, la tarjeta gráfica de la mayor parte de mis ordenadores sobremesa. Por lo general, uso AMD (aka ATI), y no están funcionando muy bien con el Gnome Shell. De hecho, en la máquina virtual que he generado en mi ordenador principal me da un error.
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